Son hilos de sustentación que se enganchan en el tejido y permiten traccionarlo. Pueden ser de material reabsorbible y no reabsorbible. Permiten corregir: pérdidas de contorno facial, falta de definición de pómulos, cola de ceja con expresión “triste”, surco nasogeniano marcado, surco labiogeniano marcado, ptosis y pliegues verticales del cuello. Su colocación se realiza en consultorio, con la aplicación de anestesia local en los sitios de inserción de los hilos y la paciente puede retomar sus actividades normales a los 7 días.